Flauta de Cristal de 1838 Restaurada

Por Lázaro Antonio Mena Cordero, Luthier Cubano

Claude Laurent fue un notable artesano de gran destreza que, aún siendo relojero, y sin grandes conocimientos de música, fue capaz de crear, a partir de cristal, flautas de concierto, de afinación y timbre perfecto e inalterable. Tanto así, que el mismo Napoleón Bonaparte (a quien Laurent seguía) uso varias de ellas como regalos especiales y únicos a personas de gran influencia con las cuales se codeaba. De manos de emigrantes españoles llega al Museo Nacional de la Música de Cuba (quienes la adquirieron en 2004), y por extensión, a mí, este ejemplar de la obra de Laurent.

Recibo la flauta en mal estado: tenía llaves trancadas, faltaban arandelas, corchos, tornillos, una llave entera, y la afectación más notoria: tenía la pata partida en varios puntos. 

Luego de reparaciones menores, llegó el momento de solucionar el problema de la llave faltante: la de Fa. Partí de una empuñadura de machete que era de plata, y la utilicé como materia prima. Usando como referencia otra de las llaves de la flauta, hice un molde con la técnica de la cera perdida, y la fundí.

Más adelante en el proceso de reparación tuve que alterar la forma de dicha llave a base de prueba y error, pues no tenía referencias visuales de cómo debía ser. 

1er modelo:

2do modelo:

*También hice la cajuela de esta llave (donde va la zapatilla) utilizando como referencia la de otra d las llaves para hacer un troquel y poder así mantener el mismo diseño.

Luego vino la confección de la réplica de la pata de la flauta.

La pata estaba en pésimo estado, y obviamente era completamente inutilizable. El primer paso fue escoger un material. Tenia q ser un material que me permitiera manipularlo con las herramientas que poseía (hechas por mi todas en aquel entonces)

 y que me permitiera llegar a un acabado lo mas similar posible al resto del instrumento. Me decante por un acrílico blanco, translucido.

Una vez escogido el material vino el trabajo de mesa. Tome todas y cada una de las medidas de la pata original: Diámetros interiores (destacar que el orificio interior de la flauta es cónico) y exteriores, profundidad y forma de los canales del diseño original, los oídos o chimeneas (donde descansan las zapatillas), etcétera, y diseñe los diagramas o bocetos que me servirían como guía para el trabajo.

Finalmente me puse manos a la obra y me di a la tarea de fabricar la pata en sí. Como dije anteriormente, un alto porcentaje de las herramientas utilizadas en este proyecto fueron hechas por mí, a mano.

 El barreno de la apertura interior la hice con una barrena común, y con una lima triangular modificada para convertirla en una rima conica de 3 vertices, la fui llevando al diámetro objetivo manualmente. 

El método de sujeción de las llaves con pilares es algo importante a destacar en esta flauta. Es un sistema desarrollado por el mismo Laurent que luego fue acogido por otros fabricantes importantes de instrumentos hasta la actualidad, siendo este uno de los aportes mas relevantes de Laurent a la construcción de instrumentos, junto con el cono invertido de bronce para la sujeción en piezas de cristal. Para realizarlo, hice un barreno en la pared del instrumento, y con una fresa conica invertida (utilizada en ortodoncia) hice el cono de adentro hacia afuera.

Los oídos o chimeneas los hice barrenando también la pared del instrumento con un diámetro menor el cual serviría de eje a la herramienta (hecha por mi) con la cual hice la torre (donde descansa la zapatilla), y luego lleve el agujero al diámetro exacto del orificio original.

Los surcos los hice con una fresa para hierro, que tenia la forma exacta de los canales.

Una vez terminada la pata y el instrumento en general, era necesario comprobar que la flauta funcionaba correctamente, donde entro a jugar mi esposa, quien es flautista profesional. Fue un proceso difícil; es un instrumento particular. Su digitación es diferente a la habitual, incluso a la de la flauta de cinco llaves, y al no contar con documentación ni acceso a internet en aquel momento, la única solución era encontrar las posiciones probando y probando… y asi fue, a pesar del cortísimo tiempo con que contábamos para ese fin. Los otros aspectos de la ejecución en el instrumento no supusieron mayor problema; aunque el tudel era de cristal y no tenia bisel, fue posible hacerla sonar con no mucho trabajo. Sin embargo había otro problema: el cristal es un material muy poco poroso, dificultando su sujeción por el interprete, a esto se le suma el sudor de las manos, que empeora esta dificultad. La que escogimos fue el 3er y 4to movimiento de la Partita en La menor (BWV 1013) de Bach (1685 – 1750)

El video de la interpretación de la obra esta disponible en:

La restauración de la flauta de cristal ha sido de exquisito valor para mí, pues la técnica que Laurent utiliza en su construcción es precisa y única.

Desde que supe de su existencia, me fascinó la idea de ponerla a funcionar. Es un instrumento que cautiva por su belleza y sabía que sería una experiencia única y maravillosa en mi carrera como luthier.

Tuve la oportunidad de ver y sentir como este instrumento construido en 1838, en mis manos, iba tomando vida y cambiando su aspecto y su belleza, pero me cautivó aún más, cuando mi esposa, me haría escuchar las melodías de la mágica flauta de cristal, despertándola de su profundo y largo sueño de casi dos siglos. Ese siempre fue mi mayor deseo, que nuestras generaciones pudieran apreciar la belleza de este instrumento y escuchar sus dulces melodías como en el siglo XIX.

Las flautas tienen la magia, la fuerza y los colores del alma, llenan de amor y esperanza a quienes la escuchan.

Vivimos en un mundo donde el amor se esta quedando en segundo plano y las miserias humanas como el odio, la sed de venganza y la envidia no le quieren dar paso a la felicidad. Por eso estamos hoy aquí, para sentir el renacer de nuestros espíritus con la bella melodía de esta histórica y cautivadora flauta de cristal que solo la minoría ha podido escuchar y apreciar.


Luthier Antonio Mena

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Luthier de instrumentos de viento con mas de 30 años de trayectoria. Ha trabajado en muchas instituciones de la Habana, incluyendo gran parte de los conservatorios y escuelas de musica de la ciudad, la Universidad de las Artes, y el Museo Nacional de la Musica. Alli comenzó como Luthier de instrumentos de percusión y poco tiempo después volvió a su perfil original, los instrumentos de viento.

Tambien han pasado por sus manos instrumentos de agrupaciones cubanas de renombre internacional, como son la Orquesta Sinfonica Nacional, la Banda Nacional de Conciertos y Arts Longa en el panorama clásico, y en el Popular, orquestas como Van Van, Irakere y la Orquesta Aragón.